China y Taiwán abrieron un nuevo frente ahora en el orden comercial que amenaza con llevar el caso hasta a la Organización Mundial de Comercio (OMC). El domingo Pekín anunció la suspensión de las importaciones de chirimoyas (anona) y manzanas de cera debido a que se ha descubierto una plaga en envíos recientes desde la Isla.
Las autoridades de Taipéi reaccionaron a la medida adoptada por el gigante asiático amenazando con llevar el asunto a la Organización Mundial de Comercio (OMC), tras indicar que China no había proporcionado ninguna evidencia científica. “No podemos aceptar esto” dijo enfático el titular taiwanés del Consejo de Agricultura Chen Chi-chun, que criticó el momento del anuncio, ya que se produjo durante el Festival del Medio Otoño, celebrado en China y Taiwán y otros países del continente asiático.
El diario Global Times, muy cercano al Partido Comunista de China (PCCH), tituló en tono burlesco que al dejar de importar las frutas taiwanesas, las autoridades del Partido Progresista Democrático (PPD) estaban “aullando”.
Por su parte, el Taipéi Times, en su edición de este lunes afirmó que China había actuado unilateralmente y sin proporcionar evidencia científica. Taiwán le ha dicho a China que llevaría el asunto a la OMC si Pekín no responde a la solicitud de Taipéi de resolver el problema bajo su marco bilateral existente antes del jueves de la próxima semana.
“La decisión de la parte continental se basa en un simple hecho, que los dos tipos de frutas subtropicales que se producen en la Isla, contienen repetidamente plagas peligrosas” precisó el medio de comunicación chino.
Taiwán ha dicho que destinará alrededor de 36 millones de dólares para ayudar a promover las ventas nacionales de ambas frutas así como tratar de comercializarlas en otros países. Según el Consejo de Agricultura, Taiwán produce 57 mil toneladas de chirimoyas y alrededor de 47 mil toneladas de manzanas de cera cada año y cerca del 90 por ciento de las exportaciones de las mismas se envían a China.
China sacó músculo de la controversia al señalar que la presidenta de Taiwán Tsai Ing-wen y sus seguidores, para referirse a los líderes del PPD, formación política que aboga por la independencia de Taiwán, no están en condiciones de enfrentarse al continente. “Taiwán tiene un superávit comercial de más de 100 mil millones de dólares al año con la parte continental de China, entonces ¿Qué ventaja obtendría la autoridad del PPD estar en desacuerdo con la parte continental y usar la Isla como una herramienta de los EEUU? ¿Estrategia anti-China Indo Pacífico?” se cuestiona el diario.
El medio chino va más allá y aprovecha para lanzar un dardo envenenado contra Taiwán al manifestar que ahora que la autoridad del partido gobernante taiwanés quiere actuar como el pero faldero de Washington, no hay razón para que el continente compre la fruta contaminada de la Isla.
